Las grasas son nutrientes esenciales para el cuerpo humano, especialmente en el ámbito hormonal, donde juegan un papel fundamental en la regulación y la producción de diversas hormonas. Para las mujeres, el consumo adecuado de grasas es crucial no solo para la salud general, sino también para el bienestar hormonal.
¿Por qué son esenciales para el funcionamiento hormonal?
- Precursores hormonales
Las grasas saludables son necesarias para la producción de hormonas esteroides, como los estrógenos y la progesterona, dos hormonas clave para el ciclo menstrual, la fertilidad y la salud reproductiva en las mujeres. Estas hormonas también impactan en la salud ósea, cardiovascular y en el estado de ánimo. - Equilibrio hormonal
Las grasas insaturadas (como las que se encuentran en el aguacate, aceite de oliva, nueces y pescados grasos) ayudan a regular el equilibrio de hormonas en el cuerpo. Sin suficiente ingesta de grasas saludables, el cuerpo podría no ser capaz de producir suficientes hormonas reproductivas, lo que puede llevar a desajustes hormonales y problemas como irregularidades menstruales. - Funciones endocrinas
Además de los esteroides sexuales, las grasas también son necesarias para la producción de otras hormonas clave, como las hormonas tiroideas (que regulan el metabolismo) y las hormonas adrenales (que gestionan el estrés). Sin grasas suficientes, puede verse afectada la producción de estas hormonas, lo que puede generar fatiga, ganancia de peso y estrés crónico.
